top of page

No esperes a la boda para vivir emociones


Una boda es un cúmulo de momentos muy especiales y muy emocionantes. Pero pasa tan rápido que seguro que agradecerás tener un buen reportaje de fotos que te recuerde todos esos momentos y todas esas emociones.

Sin embargo pocas parejas caen en la cuenta de que todo el proceso de preparación de la boda, si se sabe llevar bien, puede ser tan divertido y emocionante como la boda en sí. No exagero. Seguro que tú lo has vivido alguna vez preparando un viaje que te hacía mucha ilusión: todos los planes que hacías, las búsquedas de información en internet, la visita a esos blogs de viajes tan chulos… era casi como estar ya en tu destino.

Yo defiendo que con las bodas se puede hacer exactamente lo mismo. Lo único que necesitas es planificarte bien. Y si tú sola no te ves capaz, siempre puedes contar con los servicios de una wedding planner para que te asesore y te guíe. Ella será tu agente de viajes.

Por eso me gusta ofrecer a mis parejas mini reportajes de esos procesos de preparación. Porque son momentos singulares que tampoco los vivirás de nuevo.

De esos momentos, probablemente el más especial es el de la prueba del vestido de la novia. Ese instante en que la mamá ve por primera vez a su hija vestida de novia es algo que merece la pena tener congelado para siempre. Y merece algo más que las fotografías que pueda hacer un teléfono.

Elisabet se casó este pasado sábado. Ahora que el secreto de su vestido ya ha sido desvelado puedo publicar estas fotos que les hice a ella y a su madre hace meses en su prueba.


29 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page